Proyectos propios

Mil y un sueños

Transformar la vida de niños y niñas con enfermedades graves a través de vivencias positivas, creando experiencias únicas e inolvidables. Este es principal objetivo de la Asociación Mil y un Sueños, que apela al poder transformador de los sueños como vehículo para ayudar a recuperar la esperanza y la ilusión, mejorando el estado de ánimo de los niños y niñas y generando de esta forma una mejor respuesta ante el tratamiento de su enfermedad. Un objetivo compartido con la Fundación Xana y que ha propiciado un acuerdo de colaboración entre las dos entidades para sumar esfuerzos y poder llegar a más familias.

“Estamos felices de poder sumar una colaboración tan importante a la labor que hacemos desde Fundación Xana. Mil y un Sueños es el ‘broche de oro’ al acompañamiento emocional del niñ@ y de sus familias y representa una mejora maravillosa de la atención integral que Fundación Xana ofrece a los y las niñas que sufren enfermedades graves y a sus familias. En una misma línea de trabajo y con un objetivo en común, el bienestar emocional de las familias durante el difícil momento que están viviendo, estamos seguros que el trabajo que iniciamos en común con Mil y un Sueños tendrá un gran impacto en la calidad de nuestros acompañamientos”, explica Bela Cullell, directora de la Fundación Xana, cuya principal misión es ofrecer asistencia integral y acompañamiento a niños, niñas y jóvenes afectados por enfermedades graves y a sus familias.

Por su parte, Smara Álvarez, directora de comunicación de la asociación Mil y un Sueños, se ha felicitado por la colaboración que se iniciará en octubre: “Estamos muy ilusionados con este acuerdo con  la  Fundación Xana ya que nos mueve el mismo objetivo: ayudar a familias con hijos que luchan contra una enfermedad grave. Tanto la Fundación Xana como las Asociación Mil y un Sueños trabajamos de la mano del personal clínico que atiende a las familias, lo que nos permite tener una visión más global de la situación de cada familia y unir fuerzas para poder atenderlas de forma integral y tener un mayor impacto en ellos. Esta alianza nos permitirá llegar a muchas más familias y cubrir, de forma más amplia, las necesidades derivadas de la enfermedad que van mucho más allá del propio tratamiento médico.

EL SUEÑO COMO UN PROYECTO DE EQUIPO

Cuando la enfermedad entra en la vida de una familia, ésta se ve envuelta en una rutina de incertidumbre, miedo y ansiedad. La posibilidad de focalizarse en algo positivo proporciona a los pequeños fuerza y confianza para seguir luchando. Desde la asociación plantean el sueño como un proyecto en equipo, un objetivo en familia por el que trabajar. Juntos deben esforzarse para conseguir hacer realidad el sueño mediante tareas divertidas que ellos eligen, en las que pasan tiempo de calidad en familia y potencian las fortalezas del niño o niña, propiciando que se empodere y recupere la confianza, la esperanza y la fuerza. “Trabajamos de la mano del equipo médico que nos indica el momento de mayor necesidad para las familias y nos guía durante el proceso”, explica Álvarez.

Para crear ese impacto positivo la Asociación trabaja a partir de sueños individuales y sueños colectivos dentro o fuera del hospital para aportar un respiro a las familias y que puedan relacionarse y compartir con otras familias en situación similar en un ambiente más lúdico. Las tareas que realizan se elaboran siempre potenciando las habilidades de cada niño o niña y pensando en cómo pueden impactar positivamente en su bienestar y su confianza: Manualidades, videos, cartas, juegos... Pero también “deberes” marcados por sus médicos (mejorar la alimentación, hacer rehabilitación...), para que, mediante la fuerza que les aporta su Sueño, afronten de manera más positiva su tratamiento. “Más allá de la realización del Sueño, el camino para llegar a hacerlo posible es un trayecto de esperanza y empoderamiento. Durante todo el proceso, el niño o niña se focaliza en lo positivo y la ilusión hace que se esfuerce en hacer realidad su sueño y se vuelva más resiliente. Este es nuestro valor social”, concluye Smara Álvarez.

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